MAZHAR AL‑SHEREIDAH

26‑05‑97

A lo largo de varías décadas, en Venezuela, la "Carta Semana¡" de¡ Ministerio de Minas e Hidrocarburos y luego el MEM, era la fuente bibliográfico‑estadística más disponible y consultada por investigadores, estudiosos y analistas de( tema petrolero, En los años sesenta, hasta tenía una sección de actividades culturales que se presentaban en el país, Como tantas otras cosas buenas, desafortunadamente desapareció.

Pese a la crisis que nos rodea y bajo cuyo signo vivimos, la información se encuentra todavía disponible y a veces hasta excesiva. EE.UU. es una fuente inagotable de información y en materia petrolera; una de las publicaciones mensuales más serias y confiables es el ''Internacional Petroleum Statistics Report" del Departamento de Energía. Para el país líder del mundo, el primero entre los consumidores y el que más importa, e¡ tema es importante, por lo que las estadísticas tienen que ser precisas y oportunas, así como también las clasificaciones y nomenclaturas. Allí llama la atención que en la pág, 9 (del mes de abril), en el cuadro "Suministro Petrolero Mundial 1985 ‑ Presente", aparecen cinco columnas a saber: "EEULI, Golfo Pérsico, OPAEP, OPEP, Mundo". En la pág. 60 hay un apéndice de Definiciones Organizacionales y Geográficas, donde están: OCDE, OCDE Europa, OPEP, Miembros Arabes de la OPEP, OPAEP y Países de¡ Golfo Pérsico (Arábigo)"

¿Se trata de simple geografía o de geografía política, valga decir geopolítica o geoestrategia? Con todo derecho uno podría alegar que el marco universal que llevó a autores como Melvin Conant a escribir su "Geopolítica de la Energía" ya no existe, ahora que la URSS, el comunismo y el Muro de Berlín son recuerdos de un pasado que nunca volverá.

Cierto, pero sigue vigente la tesis de Samuel Huntington acerca de¡ "Choque de las Civilizaciones", donde el autor coloca al Mundo de¡ Islam como el candidato col) las mayores probabilidades de tener un conflicto mayor con Occidente,

Esta última teoría dejaría en el pasado las clasificaciones ideológicas como la del "Mundo libre" versus el Bloque Soviético o los países detrás de la Tortilla de Hierro", para plantear el conflicto futuro en términos "civilizatorios", para no decir religiosos, contraponiendo al Occidente Judeo‑ Cristiano contra el Oriente Islámico.

Llevado al terreno petrolero, los partidarios de esa teoría comprenden que el] el subsuelo del Oriente Islámico, yace el 80% de las reservas petroleras mundiales.

Es también la región donde los gastos en exploración dan los mejores resultados y los mayores rendimientos. La expansión de la capacidad de producción allí es la más barata del mundo,

Podría argumentarse sin embargo, que todas esas ventajas comparativas se desvanecen ante la realidad de la permanente inestabilidad en esa región, lo cual hace que en definitiva, la misma tanto para el importador como para el inversionista, deje de ser atractiva,

Acostumbrados a movernos entre extremos, el mundo estaría ante dos alternativas. La primera sería: acelerar la explotación del "petróleo islámico". Esta vía causaría un renacer del clamor que Occidente estaría agotando irracionalmente una riqueza ¡lo renovable, que debería conservarse para el provecho de las futuras generaciones del Mundo Islámico. Replantearía, además, una mayor dependencia de Occidente del petróleo "islámico" lo cual le daría a sus dueños, medios para presionar al mismo.

La otra alternativa se resumiría en preferir la rápida explotación del "petróleo no islámico", por lo que los dueños de las reservas petroleras islámicas protestarían por el "desamor" del consumidor,

Una vía intermedia sería la de satisfacer, al menos en este hemisferio, la sed petrolera occidental con petróleo occidental. Esto está ocurriendo y beneficia a México y Venezuela. México tiene un status sui generis con EE.UU, especialmente mediante el NAFTA. Venezuela aun no ha obtenido de Washington el históricamente anhelado "Trato Hemisférico". Por otra parte comparte el techo en la OPEP con diez países casi totalmente pertenecientes al Mundo del Islam, lo cual exige no poca destreza y habilidad particularmente cuando en el horizonte se divisan inquietantes movimientos en el Mundo del Islam,