MAZHAR AL-SHEREIDAH
EL MEDIO ORIENTE:
MARCO CONCEPTUAL-ORGANIZATIVO PARA
DE LOS FACTORES POLITICOS
Hay varios posibles enfoques" para interpretar la dinámica política del Medio Oriente que tiene repercusiones sobre la situación petrolera-económica de la región.
El enfoque que recomendamos arranca de procesos históricos los cuales surge en la posguerra una específica constelación de fuerzas principales (matriciales) que se reparten al mundo
creando cada Sistema Ideológico-Político-Económico su respectivo campo o Bloque con las subsiguientes áreas de dominio e influencias.
Ese cuadro o estado de cosas lo llamaremos: El Sistema Mundial
El Medio Oriente hoy expone manifestaciones importantes en varios terrenos como el: bélico, político, ideológico, petrolero, social, cultural y económico.
Ese Sistema Mundial permanece vigente en sus rasgos esenciales aunque sujeto a modificaciones limitadas surgidas por variaciones en:
* La interrelación de fuerzas entre los líderes del Sistema que en parte se modifica por el punto anterior.
* El peso, importancia o rol específico de actores regionales que experimentan transformaciones internas, reflejándose las mismas sobre
MARCO CONCEPTUAL-ORGANIZATIVO PARA
FACTORES POLITICOS
Lo que a continuación veremos tiene como objetivo enfocar y Si es necesario analizar factores que influyen el escenario Petrolero mundial. Esos factores son de carácter político.
Han sido incluidos en el análisis global porque:
* En el pasado han influido el Mercado.
* En el presente lo siguen influyendo y
* En el mediano plazo se puede asumir como premisa que seguirán conformando parte del cuadro petrolero
Como quiera que el Golfo forma parte de una región más amplia que es la del Medio Oriente; que se encuentra muy cerca de una Superpotencia;
La metodología utilizada al respecto fue la de identificar a los principales actores; las principales alianzas; los objetivos que persigue cada actor y bloque; los medios o vehículos que utilizaría cada quien para alcanzar esos objetivos; y los obstáculos que pudieran presentarse para el logro de los mismos.
En una región acostumbrada a producir "fenómenos de sorpresa", resulta inevitable considerar diferentes variables, lo cual aumenta el número de posibilidades examinadas y revisarla cuidadosamente, lo cual se está haciendo actualmente.
La tarea que tenemos ahora es la de interrelacionar:
*
* Los Conflictos del Medio Oriente:(Árabe-Israelí; Golfo (Irak-Irán; Líbano; Afganistán, con
* Los Principales Impulsores del Multi Conflicto" en el Medio Oriente, con
* Los posibles resultados de la guerra Irak-Irán., con
* Las posibles repercusiones políticas internas y regionales del punto anterior, con
* Los posibles impactos petroleros en la región y por ende sobre el mercado.
Hay posiciones declaradas que permiten anticipar las preferencias de los principales actores. También conocemos las potencialidades y limitaciones para alcanzare dichas preferencias.
Síntesis de dos Décadas de Conflictos
Fue en la tercera guerra en 1967 cuando Israel sorprende al Mundo Árabe con una organización militar impecable al lograr eliminar la aviación egipcia, ocupar el Sinai, obstruir el Canal de Suez, arrollar los territorios palestinos de la ribera occidental del Jordán, hasta entonces anexados por Jordania, así como a
En 1973 Egipto y Siria lanzan la cuarta guerra, que trajo como consecuencias políticas la separación entre los combatientes y el consiguiente acuerdo de paz, debido, en gran parte, a la iniciativa de Sadat.
Por otra parte, el hostigamiento entre Israel y
La aparición de los dos actores geoestratégicos de la era nuclear
Los dos actores principales de la bipolaridad hacen su aparición en el escenario, y un segmento de la frontera geoestratégica se traslada al Medio Oriente.
En la guerra de 1948, tanto Estados Unidos como
Cuando la guerra de Suez, último alarde de la poliarquía europea, ya
Diez años después,
notablemente, máxime después del inminente retiro de Gran Bretaña del Sur de Arabia.
Para la fecha de la cuarta guerra de 1973, el campo árabe ya no estaba tan seguro con respecto a sus aliados estratégicos: mientras Siria se mantenía fiel a sus nexos con
Desechar la idea de convocar a una conferencia mundial con la participación de
Las invasiones al Líbano la limitada de 1978 y la “fullscale" de 1982- se acometen dentro del marco de la hegemonía geoestratégica norteamericana.
Fue durante la década comprendida entre la guerra de Suez (1956) y la de los Seis Días (1967), cuando el apoyo que el bando árabe Egipto de Nasser recibiera de la superpotencia del Este equilibrara el recibido por Israel, a su vez, de la superpotencia occidental. Medir fuerzas, no sólo redujo la influencia soviética significativamente, sino que le privó de su mejor base en
El tránsito de Egipto hacia el lado opuesto de la frontera geohistórica se consumó definitivamente poco después de la desaparición física de Nasser. En lugar de Egipto,
La nueva táctica implicaba darle mayor cabida a los Estados petrolíferos, de modo que, a partir de 1973 el liderazgo pasaría a manos de los Estados más ricos de
El Nacimiento de una nueva frontera con opción geoestratégica el fundamentalismo islámico
Hablar del nacimiento de una nueva frontera con opción geoestratégica supone certificar el fracaso de la opción anterior: el nacionalismo árabe. En efecto, una cadena de guerras desastrosas e intervenciones punitivas en su territorio, lanzó al Mundo árabe al mar de la duda acerca de la viabilidad de su cohesión cultural e histórica, supuesto puente hacia la aún no alcanzada integración económica, federación política o ambas a la vez. Con
El arabismo cultural venía cobrando vigor y sentido lo que lo haría siempre potencialmente válido el arabismo político yacía derrotado, dividido y vencido. Los teóricos marxistas del arabismo tampoco pudieron rescatar lo que no habían perdido. Por una parte, mientras la convergencia política árabe soviética podía ser justificada en los años 60, los mismos gobiernos árabes aliados de
El Medio Oriente aún no parece aceptar el hecho sencillo de que la revolución islámica, apelando a los únicos principios incontrovertidos por sagrados, fuera a explotar en la propia frontera del petróleo, en el país más allegado después de Israel a la causa del mundo occidental.
Tal vez el hecho más importante acaecido en
Aún no ha logrado la tercera frontera geoestratégica extenderse al resto del mundo islámico, ni siquiera al mundo árabe de cuya frustración ha sido expresión voluntaria y, por lo
visto, poco bienvenida. No obstante, existen indicios de su raigambre en marcha. La población chiíta del Líbano, la más próxima a Irán en cuanto ideología religiosa, ha transplantado los mecanismos revolucionarios a las pequeñas parcelas del Líbano por ella controladas.
A costa de muchos sacrificios, el Irak de Baath, liderizado por Saadam Hussein, ha logrado frenar el impulso iraní. Pero no ha podido convencer a su vecina Siria, que gobernada bajo la
misma ideología cree entender mejor la situación de Irán y le brinda apoyo tácito, al igual que Libia.
Espacio geopolítico propio para actores étnicos o ideológicos locales
Kurdistán
La revolución islámica de Irán al principio no benefició a los kurdos, quienes preferirían las condiciones más amplias que les ofreciera Irak. El antagonismo chiíta-sunita parecía decisivo en una primera etapa. Luego parece que las cosas han comenzado a cambiar, con el gobierno iraní mostrándose algo más comprensivo con el etnonacionalismo curdo.
No es ningún secreto que la causa kurda asusta a Irán, Irak y Turquía al mismo tiempo. Irán no ha sido capaz de entenderse con los curdos en lenguaje postrevolucionario, pero es el que más ganaría -a la larga- con lograr el apoyo de otra nación islámica a su nueva frontera geoestratégica. Irak es el Estado con mayor experiencia de interlocutor válido frente a los curdos que, haciendo concesiones geopolíticas extremas, podría registrar un avance táctico y hasta lograr invertir el curso de la guerra a su favor, pero a la larga ni podría negarse a ofrecer la misma solución a otras minorías, ni estaría en capacidad de impedir que ese Kurdistán pro-iraquí se abstuviera de hostilizar a Turquía, en la búsqueda de una unión etno-nacionalista más completa.
El Líbano sub-balcanizado
Existen en el Líbano varios territorios separados los unos de los otros por líneas de tregua inestables que actúan como límites internacionales. Aunque la unidad jurídica de
Pero es la revolución islámica la que pretende conferir al escenario libanés una nueva escala geoestratégica al introducir en él la opción islámica. Una cosa es que el frente izquierdista-socialista estuviera identificado con una población mayoritariamente musulmana, y otra que un grupo islámico de tres que hay en el país se identificara plena e incondicionalmente con la opción geoestratégica que, sin armas nucleares ofrece, empero, el respaldo moral del arma más poderosa en términos de los cambios cíclicos: la fe.
Esto ha traído una confusión tal que el gobierno de Begín no halló mejor manera para resolver el enigma del Líbano que invadirlo, hasta los territorios seguros en manos de los falangistas. El propósito anunciado de los israelíes era el de acabar con los nidos de
La tercera opción geoestratégica es de otra índole; no entiende de sistemas de juego, no reconoce el Derecho Internacional, defiende lo que cree, es la voluntad de Dios. La única potencia en el campo occidental que ha tenido la sagacidad de aproximarse a esta tercera frontera ha sido Israel, y ello al tratarse del bastión de la revolución, en Irán, tal vez porque el judaísmo, en el fondo, es un pedazo auténtico del pensar religioso mesoriental. Pero cuando el Estado moderno de Israel ha querido acercarse demasiado al territorio de los chiítas libaneses, ha tenido que retroceder.
De hecho el Líbano está sub-balcanizado. La administración maronita funciona en torno al puerto de Junie, la drusa controla el territorio central, los chiítas están estratégicamente ubicados
al norte y este, en contacto con Siria, y al sur en la línea de enfrentamiento con Israel.
En la coincidencia entre la estrategia occidental kissingeriana de los años 70 y el surgimiento de la frontera del
petróleo estaba previsto, entre otros objetivos, el de disociar al Medio Oriente del tercermundismo de los años anteriores, y sobre todo, el Movimiento de los No Alineados(r) La idea de una gran tercera opción geoestratégica en la que el islamismo sería tan solo un pilar entre tantos el latinoamericanismo, el panafricanismo- por lejana que esté, no ha dejado de perturbarle el sueño tanto a los dueños de la economía de mercado, como a los jerarcas del Kremlin.
El Medio Oriente fue uno de los pilares fundamentales del tercermundismo, y ello en gran parte debido al rol necesario que el Egipto de Nasser hubo de desempeñar como puente entre Asia y Africa. Es el Medio Oriente un puente "subgeoestratégico" en el frente sur: después de América Latina, es la región que más se ha identificado con los valores y experiencias de Occidente. Aislar al Medio Oriente de la corriente tercermundista no alineada, sin duda la debilitaría. Ningún líder mesoriental en particular ha podido ocupar el lugar de Nasser como la máxima figura árabe o mesoriental del tercermundismo no alineado. El tercermundismo no alineado, sin base firme en el Medio Oriente, no puede responder a los objetivos de su creación, sencillamente porque la frontera del petróleo los ha sepultado.
De ahí que la revolución islámica de Irán, con todo su esoterismo, conservadurismo, desconfianza en el mundo exterior y porfiada resistencia a los ingredientes comunes de las relaciones internacionales, fue una nueva modalidad de aglutinar voluntades en torno a una nueva frontera estratégica, carente de tecnología propia pero no de una fuerza moral incontenible capaz de resistir a todas las tácticas que se le opongan, a un costo que ni el mundo occidental ni el socialismo europeo estarían dispuestos a pagar.
El saldo de la guerra con Irak, los problemas internos y el aislamiento internacional, coloca la revolución islámica de Irán en una fase nueva, ante nuevos requerimientos de convivencia y
conducta según el Código Universal, o sea, Occidental. Teherán no parece tener alternativas y aceptaría participar en el juego según las reglas que son todo menos fundamentalistas islámicas.
Pero antes de llegar a conclusiones comenzaremos por la historia.